EL SACERDOTE EN EL TERCER
MILENIO
(JOHN PAUL II)
VIVIMOS EN UNA CONFUSION DESASTROZA
EN TAN MUCHAS ALMAS PERO TAMBIEN EN UN TIEMPO LLENO DE ESPERANZA DIVINA - LA
BATTALLA SE ENFUERECE ENTRE LA VIDA DEL
ALMA O SU MUERTE (1Pet
1:17-20)
San Pablo, en
su segunda carta al Obispo Timoteo, capitulo 4, versículos 1-8, nos revela su entendimiento de la vocación del obispo en
la batalla de la fe. Leemos con mucho
amor y compasión para nuestros obispos :
Al Obispo Timoteo san Pablo le amonesta:
“Timoteo, te conjuro en presencia de Dios y de Cristo
Jesús que ha de venir a juzgar a vivos y muertos, por su Manifestación y por su
Reino:
Proclama la Palabra, insiste a tiempo y a destiempo, reprende, amenaza, exhorta con toda paciencia y doctrina.
Porque vendrá un tiempo en que los hombres no soportarán la doctrina sana, sino que, ARRASTRADOS POR SUS PROPIAS PASIONES, se harán con un montón de maestros por el prurito de oír novedades; apartarán sus oídos de la verdad y se volverán a las fábulas.
Tú, en cambio, pórtate en todo con prudencia, soporta los sufrimientos, realiza la función de evangelizador, desempeña a la perfección tu ministerio” (2Tim 4:1-5).
Proclama la Palabra, insiste a tiempo y a destiempo, reprende, amenaza, exhorta con toda paciencia y doctrina.
Porque vendrá un tiempo en que los hombres no soportarán la doctrina sana, sino que, ARRASTRADOS POR SUS PROPIAS PASIONES, se harán con un montón de maestros por el prurito de oír novedades; apartarán sus oídos de la verdad y se volverán a las fábulas.
Tú, en cambio, pórtate en todo con prudencia, soporta los sufrimientos, realiza la función de evangelizador, desempeña a la perfección tu ministerio” (2Tim 4:1-5).
EL COSTO DE MI SALVACION FUE PAGADO CON LA SANGRE PRECIOSA DE JESUCRISTO
EN SU SACRIFICIO EN LA CRUZ (1Pet 1:17-20) San Pedro anima a sus cristianos con una doctrina tan
sana para mejorarles su conocimiento de Jesús.
Aquí lo que les enseña san Pedro, leemos:
“Ustedes saben que fueron rescatados de la vana conducta heredada de sus padres, no con bienes corruptibles, como el oro y la plata,
sino con la sangre preciosa de Cristo, el Cordero sin mancha y sin defecto,
predestinado antes de la creación del mundo y manifestado en los últimos tiempos para bien de ustedes.
Por él, ustedes creen en Dios, que lo ha resucitado y lo ha glorificado, de manera que la fe y la esperanza de ustedes estén puestas en Dios.
Por su obediencia a la verdad, ustedes se han purificado para amarse sinceramente como hermanos. Ámense constantemente los unos a los otros con un corazón puro, como quienes han sido engendrados de nuevo, no por un germen corruptible, sino incorruptible: la Palabra de Dios, viva y eterna.
Porque toda carne es como hierba y toda su gloria como flor del campo: la hierba se seca y su flor se marchita,
pero la Palabra del Señor permanece para siempre.
St Teresa de Ávila
nació en 1515 y murió en 1582. Martin
Lutero nació en 1483 y murió en 1546. Santa Teresa, en sus notas de vida spiritual, escribe:
“Pocos son
los fieles que permanecen con Cristo y muchos son las muchedumbres que
acompañan a lucífero. El mas peor también son esos con lucífero nos
parecen como amigos de Cristo in publico pero lo venden en secreto. Cristo encuentra casi a nadie en quienes
puede confiarse.
Santa Teresa
y Martin Lutero eran contemporáneos. Por
eso, Santa Teresa continua con la traición de los cleros especialmente con la
secta luterana en Europa (Martin Lutero
1483-1546): En este tiempo, aprendí en las noticias todo
el daño y la destrucción causada en Francia por esos Luteranos y la manera en
que esta secta tan triste se multiplicaba en muchedumbres. Este me dolí muchísimo, aunque como si podía ayudar en este conflicto, me sentí como necesario apostar mil almas para salvar a una sola
alma de todas esas almas que se pierden en este conflicto. También
como todo mi deseo estaba tan ardiente de ternura y siempre esta, a saber que Cristo tiene tan muchos enemigos
y tan pocos amigos; esos pocos deberían probarse verdaderos fieles dignos de total
confianza.”
Nota:
Santa Teresa se queja ¿Por qué Martin Lutero dejó y abandonó la
Iglesia católica? Cuando estudiaremos los poderes
sacerdotales de Cristo en nuestra salvación, se
tratará estudiar el problema de conciencia que perdió a Martin Lutero y ¿Por qué el abandonó seguir al HOMBRE A QUIEN
JESUS ENTREGÓ LAS LLAVES DEL CIELO?. Fue una tragedia donde no se puede medir todas
las consecuencias desastrosas en las almas a través de los siglos. Que Dios les bendiga en su estudio del
SACERDOTE EN EL TERCER MILENIO bajo la amabilidad de Beato Juan Pablo II.
El profesor